COFRADÍA DE LA ORACIÓN EN EL HUERTO

La agonía de Jesús en el Huerto de Getsemaní

El paso de misterio, realizado por el imaginero granadino Miguel Zúñiga, recorre las calles sexitanas en la Semana Santa almuñequera desde el año 1995, en que la cofradía de Nuestro Señor de la Oración en el Huerto tuvo su primera y gran puesta de largo. Con un toque agrícola, dado por las diferentes flores y hierbas que adornan el trono, la hermandad ha ido consolidándose hasta convertirse en imprescindible.

La tarde del Lunes Santo almuñequero se abre al pueblo sexitano con la iconografía que representa el pasaje bíblico de la agonía de Jesús en el Huerto de Getsemaní, arrodillado y con las manos extendidas, en actitud implorante, y acompañado del ángel que le indica el camino de la Pasión y la Muerte.

Según recogen los evangelios, terminada la Última Cena, Jesús y once de sus apóstoles -Judas se había ido a ultimar los detalles de la entrega de su Maestro-, salieron de la ciudad de Jerusalén, atravesaron el torrente Cedrón y entraron en el huerto de Getsemaní, al pie del Monte de los Olivos. Jesús, que ya les había advertido antes, les dijo por el camino que aquella noche todos le abandonarían, «porque escrito está: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas». Jesús se apartó del grupo, tomando consigo a Pedro, Santiago y Juan, a quienes les confió, lleno de pavor y angustia: «Mi alma está triste hasta el punto de morir; quedaos aquí y velad conmigo». Pero ni siquiera estos escogidos fueron capaces de acompañarle velando y orando. A solas, muy a solas, cayó rostro en tierra, y suplicaba así: «Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya». Entonces, se le apareció un ángel venido del cielo que le confortaba. Y sumido en agonía, insistía más en su oración. Su sudor se hizo como gotas espesas de sangre que caían en tierra. Finalmente, se levantó de la oración, fue donde los discípulos y les dijo: «Levantaos, ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado». Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, acompañado de un grupo numeroso con espadas y palos. Y al instante se acercó a Jesús y le dijo: «¡Salve, Rabbí!», y le dio un beso. Jesús le dijo: «Judas, con un beso entregas al Hijo del hombre!». Entonces aquéllos se acercaron, echaron mano a Jesús y le prendieron. Los discípulos le abandonaron todos y huyeron.

En Almuñécar la cofradía de Nuestro Señor de la Oración en el Huerto se fundó en el año 1992 por un grupo de agricultores y gente del campo sexitano, entre ellos Rafael Díaz, ex hermano mayor, Francisco Urquízar y Manuel Pérez, actual vicehermano mayor de la hermandad. Su objetivo era completar la semana de pasión con una nueva hermandad que recorrería las calles sexitanas el Lunes Santo. «Los inicios fueron muy ilusionantes, por todo lo que significa salir la primera vez a la calle con mucha expectación de cara al público, y a la vez con muchos nervios», declaró Pérez.

Dos años después consiguieron una recaudación suficiente para encargar al imaginero granadino Miguel Zúñiga Navarro la confección de las imágenes del ángel redentor y del Cristo. Las tallas son de estilo barroco en madera de pino rojo, vestidas con ricas policromías en oro. Las imágenes fueron bendecidas el 18 de Febrero de 1995, con una madrina de lujo: la cofradía de Nuestro Padre Jesús Resucitado y Santa María del Triunfo con motivo de su puesta de largo en la calle el Lunes Santo de ese mismo año 1995.